martes, 4 de diciembre de 2018

Mientras caminas despacio, sujetándote las lumbares





17 de abril, 2017 6.00am_hoy se cumplen 20 días desde que no sé de ti. Sin embargo cada día que despierto la llama de tu nombre substrae a todo mi ser de aquel mundo hipnopómpico para situarme en otra esforzada vigilia en donde presenciaré cómo se esfuma el inerte fantasma de las imaginaciones que te sitúan en el confuso escenario de mi psicología. La diseminación de tus recuerdos es un arduo proceso que tiene resistencias de destino. Igual que cuando empecé a amarte, que toda coincidencia inclinaba a mis pensamientos para que desemboquen en tus imágenes, pues ahora cada tantos lamentos me circundan representaciones de lo que estarías viviendo tú si en algún momento me hubieras querido.
En mi regreso del enamoramiento por ti, noto que he cambiado en muchas cosas. ¡Hace tanto que no rezo por escrito a los ángeles ni a Dios! Y es mucho más chica la fascinación por lo que es o lo que era. El amor omnisciente ahora entrevista mi pecho de a intervalos quizá un poco más sorpresivos. Tan solo hay una constante: hace mejor escritura la tristeza.
19 de abril, 2017 6.30am_Recordando que algunas veces en mi vida el 17 fue un buen augurio, cada vez que apunto el año soy de pensar en porqué hasta ahora no habré tenido un golpe bueno de fortuna.

Cada vez que medito en profundidad, salgo a la calle y encuentro alguna señal relacionada contigo. Lo malo es que no te encuentro a ti. Un año atrás eran novios; después llegó la noticia que desmoronó mi mundo idílico: estaban viviendo juntos. Ahora nada detiene las imaginaciones que te ven construyendo una vida a su lado. En el futuro quién sabe, me enteraré con dudoso dolor que ya hay planes de boda o veré creciendo un vástago en tu vientre, mientras caminas despacio, sujetándote las lumbares. O cuando dejes de venir a trabajar, que ya no tendré un lugar en donde dejarte secretas flores o epistolarios. Sin embargo hay algo invariable. Aunque no te vea continúas siendo el primer pensamiento de mis días. Te acompaña la aparición de los roncos motores municipales de los camiones de la basura, el paulatino despeje de la oscuridad en el amanecer subtormesino. Mas si el destino de estar juntos existiera en algún punto recóndito del futuro insustancial: entonces quiere decir que estos dos años de incautas escrituras quizás hayan logrado mantener viva en mí alma la llama de un enamoramiento kármico y enloquecedor. Entonces ahora tan solo deberé esperarte hasta que la mágica oportunidad para estar juntos suceda. Sin embargo, el agridulce proceso de esta espera es tu imagen acompañada por la amargura de saber que ahora despiertas junto a otro hombre. Lo peligroso es que luego de todo este tiempo reviso lo conseguido interiormente y llego a la apática conclusión de que fui dejando de creer en muchas cosas: le he perdido bastante respeto a Dios.



domingo, 11 de noviembre de 2018

Canciones que antes me hacían soñar con vos, ahora lograron que deteste sus empalagosos estribillos




Domingo 6am_Desde que los dioses nos enfrentaron bajo la guarida de un mismo techo pasaron 3 primaveras. ¿Qué es lo que más importa de todo lo que pasó? En la vida de este gentil continúas siendo el primer pensamiento de cada mañana. En agradecimiento a tu imagen me fui convirtiendo en un hombre mejor de lo que era. Gracias a tu cercanía la pasión, el compromiso con la justicia, la defensa de la verdad, ya no me son ajenos. Es un honor que no había sentido. Pero tampoco me es ajeno el sentimiento de derrota que se gestó al saberte en los brazos de alguien más. Canciones que antes me hacían soñar con vos, ahora lograron que deteste sus empalagosos estribillos, ya que los has vivido con él. Algo nos cambia en el interior cuando nos decidimos a olvidar. El mundo que hasta aquellos momentos se centraba en los divages del ego, ahora suele hallar la paz en algunos algos más concretos.
11 de abril, 2017 4.30am_Hoy soné con una canción que en los días enamorados pensé regalarte. Se llamaba Seminare. Hoy expresa mucho mejor lo que siento por ti. Refleja esta impotencia, esta incertidumbre, que día por día se va convirtiendo en un inesquivable sentimiento de frustración. Pero siempre existe esa esperanza equivocada que se aferra a la manera que tienes de mirarme (nuestra única comunicación fuera de tus entusiasmados holas y los circunspectos lapsus en los que nuestros pasos están cerca), que me dice que todavía existe la remota pero tangible oportunidad de que alguna vez podamos amarnos. En la cándida temperatura de tus ojos formulo una y otra vez la introvertida verificación que nos revela un plan divino para todo el mundo. Una parte de mi alma dice que sí, aunque temo ser demasiado partidario de esta doctrina.
Mismo día, 1.15pm_Apunté tu nombre para iniciar esta carta. En la desesperación por amarte intento telepáticamente que oigas estas palabras escritas. Si todo lo recorrido fue en vano, ¿por qué este amor inmenso me sigue invitando a quererte a cada instante? ¿Por qué las coincidencias no se han orquestado antes para que yo los viera juntos?





domingo, 28 de octubre de 2018

El desamor vendría a ser el súbito reencuentro con un mundo de facultades que a simple vista nos suenan desconocidas




2 de abril, 11 de la noche

Mi alma insiste en darme motivos para vivir mostrándome tu imagen como primer pensamiento del día. Mas para evitar pensar en ti tomo distancia de estos cuadernos durante algunos días. Sin embargo, cuando despierto me doy cuenta de que desenamorarme de ti ha sido una inútil empresa de la soberbia psicológica. Por eso doliente razón será que de inmediato intento negarme a mí mismo tu existencia, y me culpo duramente por haber pensado en ti. Ahora que ya sé que eres de otro hombre, cada día comprendo un poco más que la ilusión de estar alguna vez a tu lado ha dejado de ser una dulce motivación para vivir y pasa a convertirse en una carga que iré dejando poquito a poco. Aunque como si fuera una trampa, como una tentación de un destino adverso, hoy me arrimo hasta aquí para escribirte en otro día 2 de abril, el tercero desde que tomé la decisión de escribirte únicamente a ti. Y poco a poco va desapareciendo de mi vida la preocupación de que no vinieras a mí... y en mi alma va quedando espacio para recibir a una nueva ilusión.
El desamor vendría a ser el súbito reencuentro con un mundo de facultades que a simple vista nos suenan desconocidas, pero que tienen el fin de reemplazar a una perpetua combinación de fantasías que polulaban en nuestra mente cuando reinaba el amor.
El que ya no me emocione desbordadamente el leer un texto con tu nombre es una prueba veraz de que el olvido está haciendo bien su trabajo
4 de abril, 10pm_La investigación de un libro sobre los sueños me hizo saber que los sueños hipnogógicos de ayer han tenido que ver contigo. Sin embargo en los hipnopómpicos de esta mañana la cara de otra mujer ha servido como la cálida representación de mi amor. Un alentador símbolo, una aliviadora señal de que después de todo la vida continuará... aunque no sea a tu lado. La tentación de ir a buscarte para saber si me miras es aceptablemente vencida por alguna responsabilidad o algún que otro pasatiempo. El que ya no me emocione desbordadamente el leer un texto con tu nombre es una prueba veraz de que el olvido está haciendo bien su trabajo.


DNLD



sábado, 20 de octubre de 2018

El Dorian Gray del amor que sentí por ti




18 de marzo_Y ya me ves, de nuevo escribiéndote algo antes de ir a dormirme. Cuando convoco el itinerario de tus imágenes, la respiración pareciera ser un alterado sube y baja de inquietos átomos de oxígeno; y tu ya inapelable falta será el insobornable tormento que me perseguirá durante años y años como un fantasma ególatra. Él te estaba esperando en casa a que volvieras, mientras tanto yo desde aquí pensaba que podría enviarte mis pensamientos de amor por medio de la telepatía manuscrita. Estos 5 cuadernos a letras cursivas han representado el Doria Gray del amor que sentí por ti. Me quedé aguardando a que el propio peso de las cosas fuera acomodándolo todo para que finalmente se hiciese cierta la posibilidad de estar juntos. Sin embargo el reconfortable mundo de mis ilusiones hoy se ha convertido en un extensísimo desierto. Aguardo con una expectativa de similar anchura a que la vida me enseñe a soñar de nuevo. Pero en el fondo de mi corazón continúo esperando a que la próxima oportunidad de amor seas tú.
19 de marzo, 5.15am_Puesto que la ventana del 5ºB rompió con su cíclico ritual de cerrado desde que me dormí, en una madrugada de cielos desconocidos continúo escribiendo para poder armonizar mis días con la falta de ti. Mientras, los almendros aprovechan el frescor de la noche fugaz y la luz de las estrellas. Finalmente, la vida marca una distinción importante: hoy mis problemas te han destronado de ser el primer pensamiento del día. Las patológicas secuelas que me dejó el amarte desmesuradamente se han explayado a otras relaciones. Verbigracia, practico las palabras y correcciones que posiblemente le diría a otra mujer. Sin embargo, supongo que serán demasiado melodramáticas. El reloj ya mencionado marca ahora las 5 y media de la madrugada. Desde que comencé a escribirte, hace 2 años, pocas cosas han quedado sin mencionarte respecto a esta habitación.
Estos cuadernos son solamente para tu nombre. Aunque te escribo menos no sé si voy a poder dejar de escribirte para siempre. Cada día que pasa te conviertes un poco más en mi pasado.
21 de marzo, 4.10am_Unas diez monedas se hacinan sobre el fumé formalizando el impresionista contorno un espermatozoide futurista. El sueño de una nueva madrugada se corta por una nueva intrusión de tus miradas a mi vida en el día de ayer. ¿En qué parte de tus pensamientos tienes reserva para este gentilhombre? Solamente una vez volviste a darte vuelta cuando me fui. Creo que soy la tentación con la que el Diablo pone a prueba la fidelidad que le debes a otro hombre. Aunque cuando se van los días sin verte algún algo alivia un poco el dolor de que ahora vivas con él.





sábado, 13 de octubre de 2018

Psicología barata y algún oxímoron





Algunos días el olvido va haciendo efecto, y la imagen de otra persona aparece en mi corazón desde que despierto. Pero la manuscrita que la describe parece ser de otro hombre. Inexplicablemente, por medio de azarosos mecanismos arbitrarios, hay alguna insolencia del pasado que revolotea en la ingrávida sustancia de mi psicología, igual que podría hacerlo una molesta mariposa de la noche en la habitación cuando uno enciende la luz de golpe. Esta tristeza omnisciente ha conseguido desencadenarme de la larguísima obsesión que te idolatraba en aquel inseparable trascurso de los minutos. Cuando esto sucede uno escribe más centrado en la belleza literaria antes que en la de su amor. Al morirse nuestro enamoramiento comienza la escritura sin yo. No existe un destinatario prístino para las prosas. Al notar esto, uno se da cuenta de que el dolor se produce cuando debemos abandonar de golpe a las ilusiones. Psicología barata y algún oxímoron. Y al cabo de unos años se bajan los brazos en la lucha por nuestros sueños. Hasta que ayer, 14 de marzo, miré el perfil de tu cara otra vez.
Con una burguesía casi apática mirabas un monitor Nacional. Supongo que poblarías los momentos de tu vida para que se cumpla el horario de regresar a casa, donde emocionadamente te aguarda él. Uno es un hombre más apuesto renunciando a decir y hacer para dejar contentos a los demás. Al dejar de quererte estoy volviendo a casa; al desenamorarme de ti el pensamiento es uno nuevamente. En este cuarto todo será silencio: los elefantitos no me hablan ni respiran, tan solo echan su sombra sobre la blanquedad del gotelé memorizado. pero al menos tengo una buena noticia: ayer por la tarde hice el recuento literario de aquellas notas escritas en tu ausencia. Y helo aquí, un poemario de 300 versos que empalagan. Y por supuesto: casi está finalizada la bitácora de Rummenigge.






La secuela de haberte amado




6 de marzo, 6 menos cuarto de la mañana_Soñé contigo ceca del día 2, luego de mucho tiempo. En la habitación de al lado, papá ronca como en sus mejores momentos. Detrás de la ventana los camiones municipales rumorean sus cosas sobre las primeras funciones del día. De golpe, todo es silencio otra vez. Mamá lo habrá empujado para que así ronque menos, y los camiones funcionarios sacudirán los containers en otras calles más alejadas de aquí. Junto con los ronquidos y los murmullos municipales también fue menguando el fervor apasionado que siempre vibraba en mi pecho cada vez que evocaba tu imagen.
9 de marzo, 4.ooam_Inexorablemente, continuas siendo la primera imagen de mis días. Todo desamor contagia nuestra personalidad con malhumorados tics que finalmente hallan razón de ser en las subsiguientes soledades. Estas cómicas taras enferman a nuestra mente, que continúa asociándolo todo con cosas lindas, o por lo menos con cosas que nos han gustado. Así yo sigo practicando las cosas que te diría si te tuviese aquí delante. No es que siga pensando en qué te regalaré cuando vengan los días 2, pero sí me entretengo al recordar las cositas que te fui dando en estos últimos dos años de secretas entregas. Al igual que aquellas sentimentales secuelas, la secuela de haberte amado sembró hábitos indomables en mi vida: al despertarme y antes de abrir los ojos eres la primera felicidad que me devuelve a este mundo nuestro; la primera imagen que amo... la primera voz que escucho. Y tú, cuando oyes mi nombre, ¿Te pondrás colorada, igual que le pasaba a doña Endrina? Es extraño, pero me siento mucho más aliviado desde que no vengo aquí a escribirte tanto ni tampoco por tanto tiempo en un día. Es como si de alguna manera el hecho de no escribirte a manuscrita me concediera el alivio que da el olvido. ¿Cómo completaré -pienso- estas hojas ahora que mi alma ya no tiene almacenada aquella ardorosa necesidad de estar a tu lado?







lunes, 8 de octubre de 2018

Nada de lo que existe sabe sobre la culpa de pensar en ti antes que nada en la vida





















3 de marzo de 2017, 7.30_Mi último sueño de esta noche has sido tú. Me llenó de positivismo y esperanzas, además que de amor. tenías el cabello castaño y te llamabas Merche, sumado a otro nombre femenino; me tratabas con absoluta distancia, y no me mostrabas síntoma de afecto alguno, en ningún momento del sueño. En venganza de tu desprecio, yo trataba de darte celos hablando con otra mujer. Trabajabas tras la barra de un bar. Al terminar tu turno, te parabas en la vereda para espera un bús. Los colectivos eran como aquellos en los que solía viajar de pequeño. Cuando cogías el tuyo te miraba cómo escogías dónde sentarte. El número de tu asiento era el 54.
5 de marzo, 2017_De nuevo la madrugada se inicia con un pensamiento de ti. Los ruiseñores afuera, el reloj a cuerda en las 5.ooam, o la induísta pintada en el monedero de mamá: nada de lo que existe sabe sobre la culpa de pensar en ti antes que nada en la vida. En el alma me atormenta pensar que este será otro día sin ti. De todas maneras, pueden conseguirse muchas cosas. La manuscrita más firme y más fluida; las buenas amistades que uno cosecha mientras espera el milagroso arribo del verdadero amor, los libros y poemarios que uno ha ido finalizando en consecuencia de la omnipresente falta de la persona amada. Sin embargo, todo lo que logre en un futuro lo viviré como si fuera un fracaso, puesto que todo lo que fui construyendo hasta este día lo había hecho para estar junto a ti.
21 hs_Hoy fue una tarde lluviosa. Ello le sumó melancolías al domingo para que te echara más de menos. Las imágenes de tus cabellos recogidos y de tu carita pecosa aparecieron en mi interior como un relampagueo oprimido. pero ya no me hablas igual que antes, sino que me miras con tus ojitos de caleidoscopio triste. Te amé demasiado como para atreverme a corregirte en algo. A veces una chispa de esperanza cambia obstinadamente mi desilusión por una efímera e incauta expectativa, mas todo cambia bruscamente al recordarte en los brazos de otro hombre. El relojito a cuerda, los lápices o los elefantitos que cuelgan al lado de la ventana abierta: todo cuanto hay en este cuarto fue perdiendo el alma que antes vibraba en ello, en tanto mi ilusión era una devota de ti. Las paredes me increpan con un gotelé más grisáceo, para asfixiarme en el cuarto que antaño se iluminaba con los recuerdos de tu sonrisa.










martes, 11 de septiembre de 2018

Aquellos que fueron importantes para nosotros siguen vivos dentro de cada quien



25 de febrero, 20.50hs



Hoy te sigo escribiendo, aunque sin albergar en el alma la esperanza de que algún día estas líneas alcancen a tus manos. Cada vez que leo sobre algún romántico reencuentro sigo ubicándome junto a ti en las emocionantes escenas de sus tramas. Una parte de mi mente aún está partida en dos y conversa contigo como antes. No puede haber milagro si mis sueños cumplidos necesitan el sufrimiento de un ser humano desconocido. Esa es la razón por la cual no suplico a los Dioses que me ames. Ni puedo ser feliz junto a otra mujer sabiendo que tú eres parte intrínseca de mi escritura. ¿Puede convertirse el luto en un poema? Para que así no mortifique el recuerdo de que una vez te quise.

Domingo 26 de febrero, 6.10am_Aquellos que fueron importantes para nosotros siguen vivos dentro de cada quien. Instalan sus personalidades en nuestro ser. Opinan, discuten o se quejan también. Tratamos de imitar lo que admiramos, y así se va formalizando nuestra manera de ser. Nadie nos enseñó que hemos de ser auténticos. Así hermoseamos frases ajenas con uno o dos adjetivos, o también les metemos algún sinónimo y luego las practicamos como si se nos hubieran ocurrido a nosotros a que a nadie. Es que somos tan vagos para pensar que después disimulamos nuestro vacío de alguna forma. Pensamos ideas que no nos llegan de nuestro espíritu. Mientras vamos envejeciendo lo cotidiano nos soborna con dosis de comodidad, para que así renunciemos al arte de la reflexión.

22.20hs_Y hoy, que ya no formas tanta parte de mi alma, miro en introspectivas revisiones y tu imagen ya no está donde antaño estuviste tú. Hoy en su lugar hay tan solo parapléjicas obscenidades que esconden la viva cicatriz que se extiende sobre los fondos abisales de mi pecho. Aquellas superficies insondables son sobrevoladas por otras dos imágenes: un viejo amor y el amor que no ha surgido todavía. Ahora que te sé en brazos de otro cada día que se va, vivir sin ti se volvió un poco más fácil. Los recuerdos que me han quedado de él siempre van acompañados por una dolorosa vergüenza ajena.

2 de marzo_Hoy se cumplen 31 meses desde que te vi de nuevo. En pocos días más se va a cumplir un año desde que te regalé el disco con muchacha. ¿Con qué nos saldrá el futuro? Durante dos años te escribí sin saber que estabas junto a otro hombre. Cuando el almanaque me anunciaba que inevitablemente ya habían pasado dos años fue que me acerqué hasta ti para regalarte sibilina y anónimamente los escritos que hube hacinado en ese tiempo. Pero exactamente dos semanas más tarde comprobé el vaticinio de mis sospechas: los vi de la mano. Los grandes enamoramientos nos anulan el raciocinio. A pesar de todo aquello me pregunté si no estarás esperando a que me presente, al recordar que hoy fue día 2. Se ve que todavía no me desenamoré del todo.

Este epistolario finalizará igual que comenzó: dedicándote alguna poesía en alguna hoja perdida.








jueves, 2 de agosto de 2018

Ahora ni siquiera los pensamientos quieren finalizar con el fogoso sufijo de tu nombre



21 de febrero, 5.10am_Había pasado un año desde que la realidad había partido en dos la ilusión. Ella continuaba siendo mi último pensamiento de los días. Amándola fui aprendiendo a soñar cosas bellas en el insomnio. Y manejaba las cosas día por día, como me lo había enseñado Ceci. Los días se pasan sin que consiga completar las 3 cuartillas que antaño te escribí a diario. El paso del tiempo ha menguado la velocidad de los pensamientos que te aclaman. Y aquel amor al que elegí renunciar por esperarte, hoy va conquistando los minutos de los días. Parece que la echo en falta a ella en lugar de a ti. Las 3 cuartillas diarias antes se completaban dulce y apasionadamente, ahora sólo parecen blancuzcos témpanos infatigables que combaten la creatividad de mi pluma en una lid de forcejeos entre los espacios en vacíos y la vehemencia de la tinta azul. El tiempo de esta empresa antes abría las alas y se iba volando para dejarme esposado a una línea de esquizofrenias reconfortantes que únicamente te soñó a ti. Ahora ni siquiera los pensamientos quieren finalizar con el fogoso sufijo de tu nombre. Y la eterna vigilancia de tus pasos hoy tan solo son diminutas remembranzas que a veces me recuerdan cuan vivo estuve mientras escudriñaba la vida a la espera del minuto que entrelazara nuestros destinos.
Dios no quería darme esperanzas tal y como creí. Al final resultó que la verdad de mi amor inclinaba la interpretación de nuestros confusos encuentros a favor de mis ilusiones de estar alguna vez a su lado.




lunes, 23 de julio de 2018

Las estrellas brillan menos cuando se está yendo el amor que las contemplaba



19/02/2017_Se fueron las estrellas y el amanecer subtormesino nos ha dejado un cielo de celeste pálido. Semejante a la metamorfosis de ese cielo, mi raciocinio cambia finalmente de variantes. Una derrotista confusión que aún no se decanta por saber en cuál de todos los posicionamientos de tu amor puede hallarse la existencia de este gentilhombre. Y otra vez cada mujer de esta ciudad comenzaba a ser tú. Hoy puedo decir las palabras que antaño no articulé por temor a pronunciar una profecía fatal. Pero lo cierto es que vivía en mí la esperanza de estar contigo. Pero he ido tachando la verdad con eufemismos que defendían la posibilidad de que en tu corazón habitara solamente este devoto de tus átomos y de tu existencia. Las estrellas brillan menos cuando se está yendo el amor que las contemplaba. Si por lo menos pudiera ver la seda que me sacara del laberinto de tus imágenes.

Todo comenzó en la inocencia de nuestras miradas. En cada convivencia bajo un mismo techo, estas aprovechaban para vigilarse sin regateos. Su imagen, mi Señora, no acompaña tanto como antes los sustantivos. El opio de esta vida consiste en imaginar que alguna vez podrías celarme sabiendo cómo amo a otras. Fue mentira de la esperanza aquello de que con el tiempo todo tiene su ocasión. Mínimo consuelo para mi corazón roto fue saber que he cumplido con el propósito que nació en mi alma pocos días después del día en que volví a verte. La franqueza de tus miradas hizo que otra vez nazcan sueños en mi capacidad de amar. En sus ingrávidas sustancias apoyé mis alas rotas, y así logré limpiar un poco a mi corazón de las insalubres contaminaciones de los fracasos.

dnld 2017








lunes, 16 de julio de 2018

Es sufrimiento más pequeño amarte sin tenerte que intentar arrancarte de mi alma a fuerzas del olvido







16 de febrero, 2017

Todo el día me resistí para venir a escribirte, pero finalmente encuentro en la simpleza de estas líneas el pequeño y efímero desahogo de no tenerte. Parece que todo estaba destinado para que sucediera así. Que los haya visto juntos sólo después de entregarte los dos años de oraciones que se recopilaron en estos textos. Fue culpa de ambos, nadie te pidió que abrieras estos sobre que que estaban sellados sin remite alguno. He caído en un círculo vicioso que tiene origen en las postrimerías de las madrugadas subtormesinas, y comienza a fluir a través de una copulación telepática a fuerza de escrituras cursivas en un papel, logrando así que durante el resto del día tu intangibilidad me duela menos. Aquel circuito secreto va perdiendo su efecto a medida que nos aproximamos a la medianoche. Y al despertar tu imagen crea en mi alma la necesidad de venir a escribirte otra vez.
Día siguiente, 22.25hs_Ayer se cumplió un año desde que te conté el significado de tu nombre. Aquella vez, literalmente, cumplí un sueño. Lo recuerdo como si fuera hoy, tus mejillas sonrosadas y tu mi mirada huidiza, que esquivaba el apriete de una respuesta, cuando agachaste la cabeza para ocultarme el rubor. Y exactamente un año después veo tan improbable cumplir el sueño de estar alguna vez a tu lado como una nevada en agosto. En virtud de esa improbabilidad, algo está pasando: otra va colonizando a mi mundo interior, tal como lo hiciste tú cuando había otra en mi corazón. 
Pero siempre me llena de felicidad el regreso de tus miradas, sin embargo ahora súbitamente se pone en punto muerto la aceleración de mis ilusiones, debido a la memoria que te vio acariciando su brazo. También colabora a mi deserción la irremediable imaginación que te supone en maravillosas convivencias junto al hombre a quien perteneces. Intento de que aquellas visualizaciones queden sepultadas bajo los chelos y violines de Bach. 
18 de febrero, 22.30hs_Ayer fue la primera vez que percibí la demanda de tus miradas como un reclamo de mis sentimientos, y esta tarde lloré igual que un niño cuando llegué a la inevitable conclusión de que finalmente nos amas a los dos. en contra de esta sapiencia, a conforme los días se van pasando, sigo esperando la llegada de tu amor a mi vida. Hago memoria y me doy cuenta de que los días de febrero se han ido yendo entre anotaciones y hondísimos extrañamientos a tu imagen. Van a cumplirse 31 meses desde que volví a verte, y tu recuerdo me acosa en cada despertar. No puedo seguir pidiendo a Dios por olvidarte, pues es sufrimiento más pequeño amarte sin tenerte que el que puede sentirse al intentar de arrancarte de mi alma.



dnld 2017












viernes, 13 de julio de 2018

El Waterloo de los renglones vacíos



14 de febrero, 2017

21hs_Pasan los días en la traumática batalla interna del no pensar en ti. Para ello me impongo el ayermado cometido de no venir a escribirte cada mañana en estas cuartillas blancas. El Waterloo de los renglones en blanco. Me duele el día, me duelen las noches. El cielo obscuro o escampado. Y cada jornada se termina en la lejanía de mi propósito: que me vaya doliendo menos el neurasténico hecho que existas. Ni el televisor ni la radio extinguen de mi interior a tu cara permanente, que ya parece un incendio apasionado que se forma de millares de focos destructivos. Y todo se ha convertido en un fatuo intento por olvidarte. Mis líneas ya no llegan a tus manos blancas, tu mirada infrecuente ahora no me detiene el paso. Quizá he tenido la fortuna de que otros textos hayan sido investigados por ti, mas ahora sufren el desprecio de tu compromiso con otro hombre. En mi historia cíclica los ánimos reiteran el dolor de otros desamores, que duraron por años.
Viernes, 23.15hs_El escamado interés de mis planteos va cambiando poco a poco. El hilacho infinito de las fantasías es frenado por un oportuno sentimiento de repugnancia que me pudo causar el saberte con alguien más. Demolí los castillos literarios que se fueron construyendo con el amor a tu existencia. Aprendí que una verdad dolorosa también cura, si es que nos corrige el hábito de que supongamos equivocadamente que alguien nos quiere o nos ha querido. Pero ahora sé lo difícil que es volver disimulando que no ha pasado nada. Y que un corazón roto no es algo eterno. De nuevo la sensible compañía de estas letras hizo más llevadera la carga de otro desamorío. Borges también fue una gran compañía en el itinerario de los minutos en que tu imagen empezó a despegarse de mi alma, mecanismo que forzó la noticia de saberte dormida junto a él.
No hay a quien culpar, únicamente a los consolidados azares que los escondieron a mis ojos por tanto tiempo. Hoy temo sentarme aquí para depositar aquella maltratada fe en los melancólicos versos de un poema que te nombre. Igual de grande fue la decepción con el destino –con el amor, o la Providencia-; en todos aquellos divinos mecanismos aposté una espera de dos años a que algún día llegarías.

Día siguiente, 5.10am_Los camiones de la basura son a la quietud de la madrugada subtormesina lo que un trastornado puede ser para la familia. La última herida fue decisiva. Yo era el tonto que edificó su casa sobre la arena. Y cuando los vientos de la realidad increparon uno a uno en los desprevenidos muros de mi incauta fortaleza de ensueños… todo se desmoronó. No volví a soñar contigo, sin embargo la conmovedora imagen de tu perfil continua siendo la sentida obra que inaugura cada día la ya sombría función de mis pensamientos. Hace años viví unos días como estos. Aquellos fueron peores, por cada te quiero he soltado un mar de lágrimas. Y cuando al fin pasó un año, ella volvió. Hubo tantos regresos, pero nuestros corazones nunca estuvieron listos al mismo tiempo. Dejé de creer en Dios, aunque la idea de que hay milagros es lo que me hace seguir luchando cuando las causas ya están perdidas.

dnld 2017



lunes, 9 de julio de 2018

Un jaque tácito



3 de febrero, 6.10am

Comenzó a llover. Nuestros vientos subtormesinos dan un jaque tácito a los cristales de los consorcios charros, de arquitecturas muy meditadas. Y los sonidos del viento son similares a cuando sacudimos las sábanas con vehemencia. Regresas de madrugada pero no como el amor, sino como un niño que se va de casa y vuelve al pasar penurias. Te hubiera esperado más, pero saber que vives con él desarmó las estructuras de mis sueños, dejándome sin alas para que mis ilusiones continuaran adelante.

Tenía la esperanza de que algo mágico pasara ayer. El día 2 del 2 es una simbología de la importancia que ese número representa en mi vida. Pero lo viví como un día ordinario, sin embargo en el fondo de mi alma estaba esperando que Dios impartiera sobre la Tierra un acontecimiento único, milagroso, algo que cambie el sentido unilateral del rumbo de los acontecimientos, de manera que mis ilusiones de ti comenzaran a revivir. Pero el jueves se desempeño al igual que los otros días que no encontramos señales de que nuestra felicidad está cerca. Hoy me arrepiento de no haber ido a ti en los momentos que me buscaste. Me vuelvo loco cuando veo los síntomas de que estás viviendo el amor con otro hombre. cuando te espera para despedirse tras la puerta y que nadie vea vuestros besos. Cuando le acaricias el brazo… cuando vas hasta él.

Día siguiente_Los consorcios parecen hechos de Lego, edificaciones de Tetris que se apilaron en lo profundo de la pantalla, creciendo en un horizonte manso. 4 tienen sus orígenes en los terrenos de Villamayor, 4 en los árboles de la carretera de Aldealengua, cuando un domingo como hoy regresaba del rústico pueblo de Babilafuente: los almendros se refrescan en la madrugada con la brisa subtormesina para admirar los consorcios del Barrio Garrido Norte. Hermosas ingenierías cuyas azoteas son bañadas con el amarillo solar en sus simetrías irregulares. Algunas veces me olvido lo bien que me hace escribirte a mano, de cuánto lo necesito. Anotar tu nombre en estos cuadernos, como si ese poético acto me fuera a otorgar la cercanía que necesito de ti. Uno desearía que estos platonicismos amorosos alguna vez tuvieran la oportunidad de cumplirse en vida. En cambio tan solo pudo amar a estos cuadernos manuscritos desde que te volví a ver.

Es inevitable seguir amandoté.








lunes, 25 de junio de 2018

Resurrección: nosotros vamos por esta vida arrastrando las ironías que no resolvimos en su momento.

23 de junio, 2018





22hs_El bien y el mal se disputan continuamente el gobierno de la vida de los mortales. Mientras tanto, nosotros vamos por esta vida arrastrando las ironías que no resolvimos en su momento. Tratamos de seguir los consejos que dejan los Libros Santos. De todas formas, no logro entender cómo fue que no nos hemos descuartizado unos a otros. El mundo vendió su alma por un puestucho.

Igual siempre estamos viendo cómo podemos arreglar algo. Hay algo bueno en nuestro interior. Desde lo más profundo del pozo solemos hallar refugio recordando cosas bonitas, así sentir que algún día será posible alcanzar la felicidad. Pero los días en que el Destino se empeña en hacernos daño, es muy difícil escaquearse de los sainetes.
24 de junio, 22hs_ A los mejor nos ponemos contentos al ir notando que el desamor no durará por siempre. No importa si ya pasaron 2 o 10 años, al darnos cuenta que alma sanó un poquito, regresa la esperanza de ser felices. Llegó la hora de intentar un camino nuevo. Y da menos trabajo perdonar todo. De repente nos damos cuenta que podemos volver a casa. A partir de ahora, discernimos mejor qué tipo de pensamientos son los que nos gustaría oír, pues nos hemos cansado de hacernos daño en el alma. Cada cosa pensada es un granito que suma o resta. Claro, lleva tiempo. Nadie sabe cuánto más va a esperar. Todo lo que intentamos empieza a salirnos bien, y cultivamos el amor propio aprovechando el día por día.






domingo, 24 de junio de 2018

Como una marquesina de pueblo en madrugada


25 de enero, 2017

22hs_La noche se encarga de mistificar a la ciudad de Salamanca, entretanto el futuro que llega pone en jaque a nuestras profecías que vaticinaban al amor. Hoy la totalidad de las cosas se han orquestado de manera que la pluma testifique que este será el último cuaderno de Rummenigge, puesto que esta mañana supe lo inevitable: estás viviendo con él.

Igual que el petróleo puede llegar a tapar la superficie del mar, la inmensidad de este amor enterraba las pequeñas suspicacias que me navegaban el alma desde hace tiempo, pero que resultaron verdades. Así la verdad, por más sólida que sea, se vuelve vulnerable y dudosa ante las innumerables aunque también ficticias ilusiones que puede elucubrar un enamoramiento a primera vista. Todos los sueño que he tenido contigo pareciera que el destino los hubiese traspasado a mi corazón y mi mente porque los estabas viviendo junto a otro hombre. Dos años de ilusiones en que estuvieras sola y algún día vinieras hasta mí, se han ido súbitamente con el conocimiento de que vivías en contubernio. La mentira viviendo en los pensamientos sobre ti se había explayado en mi vida como un reflejo de mi suerte. Por eso cada vez que te miraba y me sentía feliz, alguna desgracia acontecía en mi vida. ¿Qué haré ahora con el acopio de ilusiones que me han acompañado en todo este tiempo? Este cuaderno se había iniciado con una dedicatoria a tu nombre, pero ahora ni siquiera cabe en él un mote que se refiera a una partícula de tu existencia. Cada día llegarás a una casa ocupada por alguien que te espera. Aquél es el mismo que te buscaba disimuladamente cuando tú, quizá, aguardaste la llegada de un gentilhombre. Lamentablemente, el respeto a la fecha en que te volví a ver fue demasiada espera. Él fue a ti, y lo aceptaste como a un río, como a una montaña a la que vemos todos los días a través del cristal hogareño de nuestra ventana en la habitación.

Que no estés en pareja había sido la plegaria más importante que Dios no supo concederme. Ni pedir de nuevo a Dios, ni tampoco amarte, podría romper con el sistema de lazos amorosos que se ha formalizado a lo largo de estos 2 años en mi corazón. En su dañina ingenuidad mis esperanzas aún apuestan a que no le quieras lo suficiente, y con el paso de los meses, con un maltrato un día, con una pelea al otro, se vaya desgastando el mágico hechizo de vuestro enamoramiento. La inteligencia se va convirtiendo en espíritu a medida que se emplea. En donde antes hubo vida, ahora sólo hay sombras, como una marquesina de pueblo en madrugada, y al cabo de 3 días, 2 años de poesía amorosa versaron un reproche atrás del otro. La voluntad llenó ese cuenco con un número finito de versos y palabras.















miércoles, 20 de junio de 2018

Uno va entendiendo el amor de los demás una vez que llega el suyo



20 de enero, 2017 8.20am

Mi queridísima Señora,

Después de verte por 4 días seguidos, Long May you Run decora otra vez el metódico paso en limpio de otra epístola que te nombra. Tu presencia intangible ha crecido en mi corazón como una liana de ipomeas sempiternas. Así comprendí que los sueños no se trataron de vaticinios o extrañamientos: son los extremados anhelos que uno no podrá cumplir. En el de ayer, llevabas el pelo suelto y anaranjado, al contrario del último día que te vi, que lo tenías atado y tu color iba tirando al bordó. Uno va entendiendo el amor de los demás una vez que llega el suyo. Cuando te miro siento que no habrá nadie como tú en el mundo.
21.45hs_Y así, finalmente, esta semana pude cumplir otro de mis sueños: verte todos los días. Aunque no me miraste fijamente, te diste vuelta para saludarme con la mirada, pero a mitad del camino pareció que te arrepentiste. Y entonces tus pupilas no me llegaron al alma.

22 de enero, 6.10am_Ahora se llama Ce. Pero te lo había presentado en estas hojas como Albur: se ha desojado por completo, como si fuera una margarita y Dios hubiera estado jugando al me quiere, no me quiere. Parece una jabalina de complexión sinuosa, clavada en una maceta verde manzana. Esta semana, los entrecruces de nuestras miradas han coincidido más seguido que de costumbre. La ignorancia de tus actos me concedió una estúpida felicidad, hasta que ayer regresé para verte. Dios hizo que nuestros acercamientos parecieran mágicas atracciones providenciales, sin embargo solamente fueron triviales coincidencias que no significaron más que unas dosis de buena suerte al poder mirarte a los ojos una vez más.
A pesar de todo no dejo de amarte. Aunque estés con otro hombre no dejo de pensarte en todas mis soledades. Todos los días recuerdo como te acercaste después de mi primera carta. Cada instante es una rememoración de alguna frase tuya o de tus miradas.






sábado, 16 de junio de 2018

El ejercicio de la creatividad es un dulce período que se compone por todo lo referido a ti



16 de enero, 6.05am


Amada mía,

Cada día crece un poco más mi fe en la meditación. Un pequeño milagro sucede cada día. El de hoy fueron tus ojos. Desde entonces no he parado de anhelar volver a vivir la fascinación por tu mirada de caleidoscopio. Tampoco se detuvo la maravillosa noria que lleva girando el recuerdo de tus imágenes. Siempre recordé como algo negativo los momentos cuando no te dabas vuelta en presencia mía. Siempre he tenido que juntar fuerzas para aproximarme adonde estabas tú. Sin embargo, ahora que te fui conociendo por medio de tus silencios, considero (sé) que aquellos silencios, aquellas ignorancias, no han sido por indiferencia sino un disimulado esfuerzo para que no se traspapelara en tus ojos ninguna muestra de amor.
La madrugada subtormesina es más peligrosa que de costumbre. De a dos sorbitos por vez se fue terminando el té con limón. Distinto es el recuerdo de tus imágenes, que pareciera autoalimentarse con cada memoria tuya.
21hs_Ya estás por volver a casa, mi bien. Esta tarde, nuestra hora de partida coincidió. Aunque hago todo lo posible por no revivir el dulce dolor de cruzarme contigo, te adelantaste algunos minutos para ir a tomar tu té. Antes de ir a buscarte, había recibido 2 señales con la forma de tu nombre. Otro piantado entrecruce nuestro, en esta enamorada red de los sucesos temporales.
En 5 ó 10 minutos a más tardar te subirás a tu Focus. Hoy te crucé ni bien subir por la rampa. Estabas tan hermosa, con los cabellos anaranjados y sueltos. En la ida continuamos con la disimulada costumbre de ignorarnos. De vuelta nos reojeamos cual si fuéramos estrellas fugaces. Siempre estás impecable, siempre guapísima. Un servidor asistió lo mejor vestido que pudo a la secreta, figurada y hasta podríamos llamarla esquizofrénica cita. ¿Con quién hablabas ayer cuando saliste? Cuando nuestras partidas coincidieron y te quedaste parada mirándome hasta que pasé por al lado tuyo. Un día sin tus ojos es un día perdido.

Día siguiente, 20hs_La presión del boli sobre la hojita subdividida; las farolas municipales de la magnífica Chinchibarra, las estrellas que puntean el cielo ocre: aquellas miscelánea de cosas alivian un poquito la impotencia de no poder ir a buscarte. Ya estás por salir, y verás las mismas cosas que puedo ver por la ventana… Lo que me duele es que no las veamos juntos.
Esta noche preciosa no alcanza para consolar que cansa la ausencia de tus miradas. El amor es lo mismo que la creatividad en ejercicio. El ejercicio de la creatividad es un dulce período que se compone por todo lo referido a ti. No existe positivismo lo suficientemente poderoso como para contrarrestar el continuo saudade que te invoca. Ya van dos años de miradas, y no importa donde pero quiero estar a tu lado.







sábado, 9 de junio de 2018

Uno es un hombre más libre renunciando a decir y hacer para dejar contentos a los demás



4 de enero, 5 de la madrugada

Así confirmo lo que escribí algunos días atrás, que soñar con alguien quiere decir que uno al fin está listo para hacer las paces con él. Ayer me dormí buscando las cualidades buenas que pude adivinar que tienes, siguiendo la técnica de un libro que estoy leyendo: Los encuentros no son casuales. Entonces fue que soñé contigo. Era un sueño en donde tú me buscabas. La biblioteca se convertía en una asociación que impartía distintos cursos. Yo estaba medio perdido, esperando cruzarte por los distintos cuartos; en uno de ellos estaba por comenzar una clase de teatro.

El teatro jamás me interesó. Pero estaba dispuesto a hacer cualquier cosa con tal de estar cerca de ti. Así que me apuntaba a las clases esperando que tú aparecieras. El profesor tardaba en venir, sabíamos que era un hombre con experiencia, alguien ducho en su labor. Cuando finalmente llegó, empezó a hablarnos sobre la importancia de la improvisación. Para ejemplificar, se recostaba en el piso, sugiriéndonos que lo imitáramos. 
Entonces fue que te asomaste tú por una puerta entreabierta. Aquella no fue la primera vez que te vi. Y nos mirábamos en cuarto por donde nos cruzamos.

20.20hs_Y así, mi bien, se fue acabando otro día, que se ha ido desdoblando por el copioso itinerario de los pensamientos que te hablaban, te nombraban… te acarician. Fue un día positivo para la escritura de este duro epistolario, si tú estuvieras a mi lado habría sido perfecto. Ya a lo último, presiento como un imposible que nunca vayamos a estar juntos… pues seguidamente experimento la premonición de no soy yo solo el que ha amado. Como inquebrantable testimonio de tu reprimido interés, conservo el impacto de tus miradas como el de tus calladas respuestas las veces que viniste a verme cada vez que te dejé una carta. Estos cuadernillos parecerían la escritura de nunca acabar, que tejen y destejen sinuosas prosas azules en torno a la ilusión que se alimenta arduamente de tu mirar.

Epifanía, 12 de la mañana_Junto a una neblina de poca monta, la mañana de Reyes acompaña la plena resurrección del enamoramiento de ti. Después de uno o dos días en los que supuse que ya no iba a quererte, que en lugar de sentir pena mi corazón no se alteraba presenciando la cíclica y tupida costumbre de pensarte, desde ayer por la tarde que siento felicidad al no poder descabalgarme del rebosante itinerario de las ininterrumpidas fantasías que te piensan. No creo que fuera una señal, puesto que la recibí en un momento en que la estaba esperando, pero en el cuerpo de una polaca he leído tu nombre.

13 de enero, 2017_Todo cuanto soy, mi bien, indica que estuve equivocado al conjeturar que este año y medio de esperas había sido en vano, sólo porque una mañana te vi salir con él.
El Arcipreste provocaba que Doña Endrina se sonrojara sencillamente si alguien mencionaba su nombre. Yo me doy cuenta cómo te alejas cuando hablo con alguien cerca tuyo, o como te prometes a ti misma no voltear la cara, hasta el punto en que la gente te habla o te llama por tu nombre, pero tú los ignoras para no darte la vuelta cuando estoy yo presente. Como dijo Rummenigge:


Castigan a los hombres enamorándoles poco.


Así me castigas, Mireia, con tus tercos empaques de entereza, que me privan de tu mirar.




Día siguiente_Hoy te he visto tal como suelo hacerlo y tal como sueles estar tú, sentadita y muda, activa intelectualmente, mientras la mirada que Dios me niega se iba posando en diferentes lecturas administrativas. ¿Y si voy a buscarte ahora? me digo, y voy a esperarte por donde seguramente pasarás: ¿me mirarías esta vez? Pero hoy te vi más contenta que otras veces, casi como al principio, que pasaba por tu lado y se adivinaba en tu aura una sonrisa secreta. Quizá mañana, si estás, cruce a dejarte alguna cosa.

14 de enero de 2017_De nuevo quebraré mi palabra, el juramento a mí mismo que prometió no quererte más, o de seguir tratando dejar de amarte ininterrumpidamente. El lunes por la noche iré a dejarte otro sobre. ¿Cómo recibirás esta misiva? A lo largo de 2 años he ido viendo cómo contestabas con tus miradas a las cartas bien recibidas. Tu agradecimiento ha ido variando según el contenido de aquellas notas, que variaba de lo formal hasta lo muy romántico. Algunas eras bien recibidas; otras en cambio fueron respondidas con tus callados alejamientos e indiferencias, cuando te insinuaba mi amor abiertamente y con franqueza. En cambio te acercas a mí cuando te trato con distancia, con sequedad, como si fueras una desconocida.
8 de la noche, mismo día_Otro día perdido, en cuanto al intento de alejarme del pensamiento que te nombra, para así distanciar el tiempo que existe entre una imagen que te ama y otra. No me pude distanciar ni un momento de ti. De nuevo tus palabras me han atacado como una plaga que demanda toda mi atención. De nuevo tus caritas alumbraron la opacidad espesa de mis ergástulas mentales. Reincide en este pecho la acusación que te declara la esporádica culpable de este enamoramiento inextinguible. ¿Qué harás mañana si nos vemos? ¿Estará también él? ¿Cómo recordarte sin decir te echo de menos?